Pescadores artesanales: el orgullo de pescar en familia y un proyecto para ser reconocidos

2022-11-07 17:03:21 By : Mr. Steven Chen

Por generaciones, los pescadores de Caleta Córdova han sabido sortear múltiples obstáculos para defender su oficio.

Son hombres de mar, curtidos en el oficio de capturar las especies que ofrece la costa y sobre todo, orgullosos de su esencia, conocedores de la biología y de los comportamientos de la naturaleza.

Abuelos, padres, nietos y los que vendrán. Transitan el mismo camino de botes y redes; de artes milenarias adaptadas al tiempo y a la necesidad. Se los define como “ingenieros” del mar por su conocimiento del recurso y su habilidad para navegar en las condiciones que se presenten.

Son los hombres “sin rostro” de la industria, invisibilizados; cuyas piezas no pueden ser reconocidas públicamente pese a ser la vedette en los programas de gastronomía que se emiten en vivo desde la zona.

Lucas Salas representa a los pescadores artesanales que además lograron popularizar uno de los espacios turísticos más emblemáticos de la zona norte: el patio de comidas “Frutos del Mar” ubicado en el acceso del muelle de Caleta Córdova, un clásico inevitable para los cultores de los placeres gastronómicos.

“Nuestra centolla es un producto estrella y es muy común que se vea en todos los programas de cocina que se hacen desde acá. Es un producto que tiene muchísima demanda y cuya captura requiere de mucho trabajo. Nosotros utilizamos nuestras trampas, tenemos experiencia y pretendemos que esto trasciende ya no solamente a nosotros como pescadores, sino a nuestros hijos”.

“Somos los primeros en cuidar los recursos que tenemos; queremos estar dentro de la ley; ser considerados para que nuestro oficio se valorice; podamos crecer a nivel de producción y asumir todos los compromisos que hagan falta. Caleta Córdova necesita generar trabajo; es un barrio de pescadores y queremos y respetamos mucho nuestro lugar”, dijo Salas quien junto a un grupo de pescadores trabaja en el acondicionamiento del barco “Milagros”, un tracker para pesca de espera de 8 metros; adquirido para avanzar con la pesca de centolla y langostinos entre otras especies.

La Ley de Desarrollo y Promoción de la Pesca Artesanal contempla que a través de la Secretaría de Pesca se gestionen permisos para ser asignados a embarcaciones que operan exclusivamente dentro de la Zona IV. Los permisionarios a quienes alcance la ley no podrá ser autorizados bajo ningún concepto a operar en otra distinta a la mencionada. Asimismo las embarcaciones deberán acreditar una eslora máxima que no supere los 9,90 metros.

La pesca total en cada marea será de 300 cajones por embarcación. Los permisos corresponderán a los proyectos locales que cumplan con el arraigo en la zona, inversión proyectada, abastecimiento local de sus productos y reinversión de su proyecto pesquero con destino a una banquina de pescadores para la comunidad, a fin de fomentar la nutrición de la población local.

El abastecimiento del mercado es la base del proyecto pesquero y quienes no cumplan con estos requisitos, serán excluídos en el otorgamiento de los permisos.

“Los pescadores son pobladores de su barrio que aspiran seguir con su proyecto personal de desarrollo integral, familiar y productivo. Es gente de un barrio de toda la vida, con la costa enfrente y debemos entregarles las herramientas para abastecer el mercado local con el producto propio de nuestras costas”, reconoció María Magdalena Cativa, diputada provincial quien impulsa un proyecto en la Legislatura para reconocer y “blanquear” el trabajo de este grupo de pescadores.

“Ellos siempre quisieron hacer su pesca artesanal y han tenido que superar muchos obstáculos. Esta es una manera de reivindicar a todos los pobladores de Caleta”.

Indicó que este anteproyecto prioriza la tramitación de permisos para desempeñarse en una zona asignada y poder comenzar con un proceso de producción.

“Sería histórica esta conquista para los descendientes de los pioneros del barrio. Es gente que se dedica a este trabajo de toda la vida pero que desde hace décadas sufren la “no definición” de su propio progreso”.

“Las expectativas para el tratamiento –dijo Cativa- pienso que son muy buenas porque tenemos que considerar que hablamos de vecinos muy conocedores del lugar siendo defensores del recurso”.

“Se puede generar trabajo local y no creo que haya un diputado que no considere la reivindicación de éste sector” dijo respecto al proyecto que será presentado en Legislatura esta semana y se trabajará con la comisión correspondiente.#

Por generaciones, los pescadores de Caleta Córdova han sabido sortear múltiples obstáculos para defender su oficio.

Son hombres de mar, curtidos en el oficio de capturar las especies que ofrece la costa y sobre todo, orgullosos de su esencia, conocedores de la biología y de los comportamientos de la naturaleza.

Abuelos, padres, nietos y los que vendrán. Transitan el mismo camino de botes y redes; de artes milenarias adaptadas al tiempo y a la necesidad. Se los define como “ingenieros” del mar por su conocimiento del recurso y su habilidad para navegar en las condiciones que se presenten.

Son los hombres “sin rostro” de la industria, invisibilizados; cuyas piezas no pueden ser reconocidas públicamente pese a ser la vedette en los programas de gastronomía que se emiten en vivo desde la zona.

Lucas Salas representa a los pescadores artesanales que además lograron popularizar uno de los espacios turísticos más emblemáticos de la zona norte: el patio de comidas “Frutos del Mar” ubicado en el acceso del muelle de Caleta Córdova, un clásico inevitable para los cultores de los placeres gastronómicos.

“Nuestra centolla es un producto estrella y es muy común que se vea en todos los programas de cocina que se hacen desde acá. Es un producto que tiene muchísima demanda y cuya captura requiere de mucho trabajo. Nosotros utilizamos nuestras trampas, tenemos experiencia y pretendemos que esto trasciende ya no solamente a nosotros como pescadores, sino a nuestros hijos”.

“Somos los primeros en cuidar los recursos que tenemos; queremos estar dentro de la ley; ser considerados para que nuestro oficio se valorice; podamos crecer a nivel de producción y asumir todos los compromisos que hagan falta. Caleta Córdova necesita generar trabajo; es un barrio de pescadores y queremos y respetamos mucho nuestro lugar”, dijo Salas quien junto a un grupo de pescadores trabaja en el acondicionamiento del barco “Milagros”, un tracker para pesca de espera de 8 metros; adquirido para avanzar con la pesca de centolla y langostinos entre otras especies.

La Ley de Desarrollo y Promoción de la Pesca Artesanal contempla que a través de la Secretaría de Pesca se gestionen permisos para ser asignados a embarcaciones que operan exclusivamente dentro de la Zona IV. Los permisionarios a quienes alcance la ley no podrá ser autorizados bajo ningún concepto a operar en otra distinta a la mencionada. Asimismo las embarcaciones deberán acreditar una eslora máxima que no supere los 9,90 metros.

La pesca total en cada marea será de 300 cajones por embarcación. Los permisos corresponderán a los proyectos locales que cumplan con el arraigo en la zona, inversión proyectada, abastecimiento local de sus productos y reinversión de su proyecto pesquero con destino a una banquina de pescadores para la comunidad, a fin de fomentar la nutrición de la población local.

El abastecimiento del mercado es la base del proyecto pesquero y quienes no cumplan con estos requisitos, serán excluídos en el otorgamiento de los permisos.

“Los pescadores son pobladores de su barrio que aspiran seguir con su proyecto personal de desarrollo integral, familiar y productivo. Es gente de un barrio de toda la vida, con la costa enfrente y debemos entregarles las herramientas para abastecer el mercado local con el producto propio de nuestras costas”, reconoció María Magdalena Cativa, diputada provincial quien impulsa un proyecto en la Legislatura para reconocer y “blanquear” el trabajo de este grupo de pescadores.

“Ellos siempre quisieron hacer su pesca artesanal y han tenido que superar muchos obstáculos. Esta es una manera de reivindicar a todos los pobladores de Caleta”.

Indicó que este anteproyecto prioriza la tramitación de permisos para desempeñarse en una zona asignada y poder comenzar con un proceso de producción.

“Sería histórica esta conquista para los descendientes de los pioneros del barrio. Es gente que se dedica a este trabajo de toda la vida pero que desde hace décadas sufren la “no definición” de su propio progreso”.

“Las expectativas para el tratamiento –dijo Cativa- pienso que son muy buenas porque tenemos que considerar que hablamos de vecinos muy conocedores del lugar siendo defensores del recurso”.

“Se puede generar trabajo local y no creo que haya un diputado que no considere la reivindicación de éste sector” dijo respecto al proyecto que será presentado en Legislatura esta semana y se trabajará con la comisión correspondiente.#