Entrevista: Guillermo Ochoa recuerda una foto especial con Zague; revive sus días en Coyoacán y el trago amargo del 2010 - Los Angeles Times

2022-11-07 17:27:55 By : Ms. Lily Liu

A pesar de no haber nacido en la Ciudad de México, el arquero de la selección mexicana Guillermo Ochoa se considera todo un “chilango”. El próximo cinco veces mundialista creció cerca de Coyoacán, una colorida área de la capital mexicana, en la Colonia del Valle.

“Es el corazón de México, porque tienes música típica mexicana, comida típica mexicana. Tienes mercaditos, tortillas hechas a mano, antojitos, quesadillas, enchiladas, tacos”, describió Ochoa en una entrevista con LA Times en Español en Los Ángeles durante la reciente gira de despedida del Tri en California.

Ochoa ha sido el arquero titular de la selección mexicana en Brasil 2014 y Rusia 2018. Se perfila para jugar su tercer Mundial de forma consecutiva en noviembre en Qatar 2022.

“Tienes un restaurante para probar mezcal y tequila. Tienes los helados, los churros, los elotes. Encuentras de todo”, expresó Ochoa sobre esa área de Coyoacán, donde su familia llegó de Guadalajara cuando ‘Memo’ tenía apenas 10 años. “Es muy bonito, muy colorido. Es muy agradable con sus iglesias, templos, la casa de Frida Kahlo. Tiene de todo”.

En Coyoacán, el papá de Ochoa tiene un restaurante llamado Tortas Don Polo, el cual ya tiene más de 60 años de existencia, y que el guardameta mexicano también mencionó en una lista de Expedia de Ochoa y sus lugares predilectos para visitar en la Ciudad de México. Incluso, Expedia tiene un tour especial diseñado por Ochoa para aquellos que quieran visitar la capital mexicana.

“Lo recomiendo porque puedes ir desde los desayunos, comidas, cenas. Tienen desayunos como huevos caporal, huevos rancheros, tienen enchiladas, mole, chiles en nogada, tortas de bacalao, torta cubana, todo de todo”, expresó Ochoa sobre Coyoacán y el restaurante Don Polo. “Licuados, pan hecho a mano, una máquina para hacer café del año 65 o 70. Entonces tienen todo, todo lo tradicional. Y a la gente le gusta eso, le gusta porque le hace recordar su México de hace unos años”.

Ochoa recordó cuando crecía en Coyoacán y su papá caminaba hacia el restaurante, mientras él se divertía jugando con sus amigos. En el negocio de su papá, el cual está localizado a dos cuadras de la casa donde vivía Ochoa, existe actualmente una foto del arquero mexicano cuando tenía alrededor de 10 años, edad en la que gozó de una niñez llena de actividades y travesuras.

“Me aventaba nuestros partidos de futbol americano y pues andábamos ahí, tratando de no hacer enojar a los vecinos porque de repente les rompíamos algún retrovisor, algún vidrio. Nos subíamos en los coches, armábamos nuestras porterías de madera, éramos hasta carpinteros, poníamos nuestras redes y jugábamos en la calle”, dijo Ochoa.

El arquero del América señaló que no faltaban los partidos de béisbol, futbol americano y básquetbol.

“De ahí me iba caminando al restaurante de mi papá y le daba baje con una torta, con un jugo o con un licuado. Me llevaba a los cuates que tenían sed y también (tomaban) dos o tres jugos”, expresó Ochoa con una sonrisa.

Ochoa reconoció que escoger los mejores lugares de la Ciudad de México no fue fácil ya que hay varios lugares favoritos como el Centro Histórico, “una zona muy bonita para caminarla, con restaurantes muy buenos y con algunas terrazas muy bonitas”. También recomendó la zona de San Ángel, por su parque y la zona artística. Además, citó la Colonia Roma, la Condesa, la zona de Ámsterdam, las arenas de lucha libre y la Zona Arqueológica de Teotihuacán.

“Las pirámides empiezan un poquito más afuera de la Ciudad de México, pero las consideramos nuestras”, declaró Ochoa, quien también recomendó El Mercado Jamaica, donde “puedes comer alacranes”.

Durante esa etapa, Ochoa se tomó con Luis Roberto Alves ‘Zague’ cuando este era jugador del América. De acuerdo con Ochoa, la foto fue tomada en una sesión de autógrafos en un supermercado y casualmente el ahora arquero de las Águilas tenía una camisa amarilla, un color que lo iba a marcar en su carrera para siempre.

“Pasamos por ahí y vemos que está a la fila y me dice mi mamá, ‘oye, ¿nos formamos?’ y dije, ‘sí, nos formamos’. De repente vamos llegando. Y luego ves a alguien que va llegando, a alguien que yo he visto en la tele, es un famoso. Y justo coincide porque yo traía una polo amarilla y se quedó marcado porque al tiempo yo entré a la escuelita del América y bueno, ya desde ahí era una señal de que iba a ser americanista”.

“Coincide porque yo traía una polo amarilla y se quedó marcado porque al tiempo yo entré a la escuelita del América y bueno, ya desde ahí era una señal de que iba a ser americanista”.

— Guillermo Ochoa sobre una foto que se tomó de pequeño con Zague

Zague estuvo recientemente en Los Ángeles en una firma de autógrafos y al recordar esa foto también se dibujó una gran sonrisa en su rostro.

“Era el día del niño, el 30 de abril. Los papás de ‘Memo’ lo llevaron para tomarse una foto conmigo. Está sentado como en mis piernas”, declaró Zague, quien platicó más a fondo sobre la carrera de Ochoa con LA Times en Español.

El arquero de 37 años de edad jugó en Francia de 2011 al 2014 en el Ajaccio, además de 2014 a 2017 en el Málaga y Granada de España. Luego pasó en 2017 a 2019 en Standard Liege de Bélgica. En los tres países jugó fuera de la capital, pero dijo haber conocido mucho los pueblos aledaños.

“Hay unos pueblos aledaños fantásticos para comer. Yo comí mejor en Francia fuera de París que en París”, declaró Ochoa, para luego recomendar sus lugares favoritos en Francia.

“Esta la parte de Annecy de Niza, de la Bretaña. En el norte hay unos castillos divinos en la parte del norte de Bretaña. Hay que conocer en la parte de del sur de Cannes, Marsella, Niza. Creo que todo eso es muy bonito es para visitar”, indicó el guardameta que vivió en la isla de Corsica, la cual calificó como un lugar “donde necesitas una semana para visitarla”.

En noviembre, Ochoa llegará a su quinto Mundial en su carrera y en el que se espere que juegue su tercero en forma consecutiva. En 2006 fue como suplente de Oswaldo Sánchez y tenía remotas posibilidades de jugar. Pero en 2010, cuando destacaba en el América y todo parecía que iba a ser el arquero de la selección mexicana, fue reemplazado bajo los tres postes en una decisión polémica del entonces entrenador Javier Aguirre. En su lugar estuvo Óscar Pérez, arquero del Cruz Azul.

En retrospectiva, Ochoa indicó que fue un movimiento técnico que lo dejó marcado.

“No fue un paso sencillo, no fue un golpe fácil de digerir y no solo por lo que venía siendo yo previo al Mundial 2010, donde entramos al final de la calificación de Mundial. Ganamos la Copa de Oro, entonces lo venía haciendo muy bien y después cuando llega la hora de lo bueno, no tuve el mismo apoyo del otro lado y no fue fácil porque yo sí me veía jugando la Copa del Mundo”, declaró Ochoa sobre aquel Mundial donde el Tri fue eliminado en octavos de final por Argentina. “No fue una de mis copas preferidas, pero me quedó esa espinita de decir oye, aquí no termina la historia, quiero jugar y quiero hacerlo. Y entonces ahí es hacer también de revancha para los próximos Mundiales que pude jugar”.

Cuatro años después, llegó el Mundial de Brasil en el que Ochoa hizo un gran debut en una tarde lluviosa de Natal, en la que contó con grandes atajadas, una de ellas clave al final del partido en un cabezazo del camerunés Benjamin Moukandjo , además del inolvidable encuentro ante Brasil en Fortaleza, en la que atajó varios disparos con sello de gol, incluyendo uno de Neymar que dio la vuelta al mundo.

“Ese partido y ese Mundial va a ser el número uno porque fue mi debut en un Mundial y dos porque hice uno de los mejores partidos de mi vida. Un partido que me marcó un antes y un después de mi carrera. Y pues un Mundial siempre es una oportunidad para para demostrar y hacerte ver y darte a conocer en el mundo”, expresó Ochoa.

“No fue un paso sencillo, no fue un golpe fácil de digerir y no solo por lo que venía siendo yo previo al Mundial 2010... lo venía haciendo muy bien y después cuando llega la hora de lo bueno, no tuve el mismo apoyo del otro lado y no fue fácil porque yo sí me veía jugando la Copa del Mundo”,

— Guillermo Ochoa, portero de la selección mexicana sobre el Mundial 2010

“El Mundial es uno de los mejores momentos para ser tu mejor partido. Y si alguien o algún joven lo quiere hacer y tratar de disfrutarlo. La Copa del Mundo, aunque a veces con tanta presión y tensión y cosas en juego, uno no lo hace y trato de hacerlo. Y más hoy a la fecha tampoco me ha dado tiempo de disfrutarlo. El futbol va tan rápido que ya estamos de cara a otro mundial y con muchas ganas de que nos vaya mejor, mejor de lo que nos ha ido grupalmente en los mundiales pasados”.

Cuatro años después llegó el partido ante Alemania en Moscú, el cual el Tri ganó por la mínima diferencia, aunque no se logró el quinto partido, algo que aspira Ochoa alcanzar en este 2022 en Qatar.

“El grupo está bien, está convencido del trabajo que se ha hecho. Por su puesto con la auto critica hemos tratado de mejorar”, declaró el guardameta. “Hay cosas que muchas cosas no podemos controlar, si lo tratamos de controlar, jamás lo vamos a lograr”.

Oriundo de Yucatán, México, Eduard Cauich se graduó en Periodismo de CSUN. Trabajó en Univision, MLSSoccer.com, Azteca América, La Opinión y MLS. Ayudó en el lanzamiento de HOY en 2004 y en 2011 volvió a HOY, ahora LA Times en Español.